La constatación en nuestro país de un proceso continuo y sistemático de pérdida de vigencia del convenio y vacío normativo, por el que se cuestiona la negociación colectiva como marco regulador básico de las relaciones laborales entre empresas y trabajadores y como elemento estabilizador de paz social y productiva, ha creado un problema de vacío normativo, contractualización y desregulación, absolutamente extraño a nuestras relaciones laborales.